¿No te gusta tu voz?, ¡Te diré porqué!

Cuando escuchas tu propia voz en una grabación, ¿es de tu agrado?... puede ser que sí, pero escucharse a sí mismo no es muy agradable para la mayoría. ¿Sabes por qué ocurre esto?

Tal fenómeno se debe a que el sonido que llega hasta tus oídos es una versión de la realidad hasta cierto punto modificada. A diferencia de cuando hablas o cantas, el sonido que reciben tus oídos no está pasando por todas las cajas de resonancia de tu cuerpo, por lo que tal perspectiva cambia tu voz considerablemente. Cuando emites sonido lo recibes mediante el oído externo, pero recuerda que tus cuerdas vocales vibran para generarlo, así como tus huesos y conducciones óseas; que se encargan de transmitir las frecuencias sonoras más graves. Algo similar ocurre con una fotografía o un espejo; obsérvate y verás que después de cierto tiempo habrá una sensación extraña que provoca cuestionamientos internos... filosófico o no, todo este asunto tiene que ver con tu perspectiva.

¡Experimenta! coloca tus manos por detrás de tus oídos y habla… ¿Sientes como cambia el timbre de tu voz? Esto no ocurre cuando escuchas a otra persona, pues siempre estarás recibiendo su voz desde fuera, o bien, como receptor.  ¿Qué opinas?

René Guerrero

@reneguerreromusic
@másmúsicos

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